«¡¿De verdad que Dios quema a las personas eternamente si no se bautizan?!» le preguntó su hija adolescente, Darby, a Jeremy al entrar en la habitación. Luego, le mostró un vídeo de TikTok que había encontrado por casualidad.
Esa conversación fue el punto de inicio de una serie de acontecimientos que llevaron a Jeremy y a su familia —que habían abandonado la iglesia hacía años— a reencontrarse con el evangelio.
Jeremy y su mujer Lynn no crecieron en un hogar cristiano. Conocieron la iglesia cuando eran veintiañeros, a través de una campaña evangelística. A Jeremy le encantaban la profecía bíblica y las doctrinas, pero poco después de bautizarse, dejó de ir a la iglesia. No es que tuviera una mala experiencia con la gente. Pero entre el fallecimiento de Lynn, su nuevo matrimonio, el nacimiento de los gemelos, y el estrés de llegar a fin de mes, la iglesia le parecía agotadora y no la echaba de menos.
Sin embargo, ahora que Darby hacía estas preguntas trascendentes, Jeremy se dio cuenta de que él sabía las respuestas, pero ella no. «Bueno, vayamos a la iglesia a descubrirlo», respondió.
Tras esa conversación, Jeremy buscó por internet a un pastor al que solía escuchar, David Asscherick. Tras escuchar un tema, YouTube añadió a la cola de reproducción una nueva serie: las Live Sessions [Sesiones en directo] de Light Bearers, una sesión de estudio bíblico mensual entre David y otros dos pastores, Ty Gibson y Angelo Grasso.
Angelo compartió que, a pesar de haber crecido en la iglesia, de joven se había sentido emocionalmente desconectado del evangelio.
En la siguiente sesión de estudio, Jeremy escuchó a Angelo compartir que, a pesar de haber crecido en la iglesia, de joven se había sentido desconectado del evangelio. Estaba dispuesto a abandonar la iglesia cuando escuchó un sermón acerca de la mujer que había ungido los pies de Jesús con aceite debido al amor casi impulsivo que sentía por él. Angelo pensó: «Dios, yo quiero amarte así». Explicó que aquel fue el momento en el que se dio cuenta de que Jesús es una persona que murió por él y que esto no se trataba de una religión sin más.
A Jeremy le encantaban la profecía bíblica y los mensajes de los tres ángeles cuando se convirtió en creyente —las ideas—, pero mientras escuchaba a Angelo, no recordaba haber tenido nunca una conexión emocional con Jesús como persona en todos los años que llevaba asistiendo a la iglesia. Él quería eso. Así que al terminar el estudio bíblico, Jeremy le pidió a Dios que conectara el evangelio con su corazón.
Se dio cuenta de que, en todos los años que había asistido a la iglesia, nunca había comprendido plenamente la centralidad del evangelio ni la conexión de cada doctrina con Jesús.
Al día siguiente, buscando en YouTube, se encontró con una serie de sermones de Ty Gibson. Al escucharlos, Jeremy sintió que estaba escuchando el evangelio de una manera totalmente nueva. Él mismo lo describió así: «Dios me arrancó el corazón, pero entonces creó uno nuevo para mí». Se dio cuenta de que, en todos los años que había asistido a la iglesia, nunca había comprendido plenamente la centralidad del evangelio ni la conexión de cada doctrina con Jesús.
Nos gustaría pedirte que orases por Jeremy y su familia ahora que han empezado a guardar el sábado y a asistir a la iglesia de nuevo. Él siente que ahora es diferente. Le resulta casi inevitable compartir lo que ha aprendido; se lo cuenta a sus amigos y a sus compañeros de trabajo: «¡Tienes que escuchar este sermón! Te explica cómo pensar sobre Dios».
Ty Gibson
Además de ponente, Ty es el director de Light Bearers. Como comunicador apasionado, con un mensaje que abre las mentes y mueve los corazones, Ty enseña acerca de diversos temas, haciendo énfasis en el amor eterno de Dios como tema central de la Biblia. Ty y su esposa Sue tienen tres hijos y dos nietos.
